El papel nefasto de la prensa burguesa en estas elecciones ha llegado a niveles verdaderamente dramáticos; ante la negación de la realidad y la instauración y fortalecimiento de la mentira, el escarnio y la farsa, se ha llegado al nivel en que los “periodistas”, así con comillas (payasos cojudos maquilladores de la realidad), participan también de la noticia y de los hechos que suceden adelante de la pantalla, y, todo ello, con el fin de desvirtuar la realidad, fungiendo de perros policías, haciendo de peleadores callejeros, buitres, hostigadores, con el fin de provocar y generar su propia sanguaza noticiosa.
Lo sucedido el día jueves en la marcha contra el retorno del fujimontesinismo fue un insulto al pueblo en su conjunto. Mientras Canal N decía que sólo había 600 personas (cuando después se supo que en los momentos más álgidos se llegó a los 25 mil manifestantes), canal 2 informaba de un ataque a sus periodistas propiciado por el escritor Dante Castro y se preocupaba en preguntar a los taxistas por el tráfico automotriz. Felizmente estuvimos cerca al escritor (acusado de "barra brava" y “seudointelectual”) y pudimos hacerle una breve entrevista como descargo.
Abajo pegamos el texto de Dante Castro en torno a estos hechos lamentables; lamentables por el lado de la prensa corrupta que se vende por un plato de lentejas, que no es capaz de asumir su compromiso con la verdad y que sólo se preocupa por respaldar un sistema putrefacto, que, no sólo se cae a pedazos, sino que se esfuerza en arrastrar a un país entero al hoyo.
Los hechos trastocados por el canal:
El descargo:
¡HORROR! SEUDOINTELECTUAL AGREDE A FUJIREPORTERO PARAMETRADO
Escribe: Dante Castro Arrasco
El periodismo es algo más que una carrera universitaria. Así lo confirman quienes hacen periodismo sin haber estudiado en una escuela de Comunicación Social o incluso quienes, como el fallecido Manuel D’ornellas, decían que es el oficio de los “sin título”. Si revisamos biografías, constataremos que muchos buenos periodistas se hicieron tales en las salas de redacción de diversos medios. Ahora que abundan escuelas de comunicación en diversas universidades públicas y privadas, los egresados de éstas compiten en los medios con otros profesionales.
Pero el oficio de comunicador social se demerita cuando se pone al servicio del fascismo. Estamos asistiendo atónitos a la parametrización de los medios de prensa y a la subordinación de nuestros colegas para que acaten el rol infame de propagandistas de una sola candidatura: la de Keiko Fujimori, hija del ex dictador que purga condena en cárcel de lujo. El criminal violador de derechos humanos, de garantías constitucionales mínimas, el ladrón que ha saqueado a su antojo el erario nacional, no sólo tiene sucesora, sino también quienes escriban por él. Y más allá de la prensa escrita, quienes hacen programas de TV y radio, con el único fin de perpetuar a la mafia fujimontesinista torciendo la conciencia de millones de peruanos.
La dictadura de Fujimori y Montesinos inauguró una nueva era en el periodismo nacional: la de la prensa amarilla y de la TV basura. Los talk show y la prensa chicha a 50 céntimos pervirtieron al consumidor y efectuaron una lobotomía colectiva, de la cual ahora vemos sus efectos. No se nos diga que no actuamos. En 1998 hicimos una memorable protesta multitudinaria con todos los colegios de Lima, en plena dictadura, protestando contra este instrumento de dominación.
Queda bien claro que para hacer este tipo de “periodismo”, no se necesita ni talento ni profesión. Basta ser delincuente embozado y fingirse comunicador social. Hoy mismo, periodistas que no quisieron acatar el rol impuesto por los dueños de los medios donde trabajaban, han perdido el empleo. Otros, se sostienen en ellos bajo amenaza. Muchos están fuera hace tiempo porque se les niega el derecho a sobrevivir con aquello que sí saben hacer. Detrás de la máscara de la libertad de expresión, encontramos subempleo, subordinación, explotación y falta de derechos elementales para hombres y mujeres de prensa.
Provocadores y soplones a la orden
Decimos que la ética no funciona para aquellos que han confundido su rol de comunicadores sociales con el vil oficio de soplones. Delatar y provocar refugiándose tras una cámara, no es hacer periodismo. Ya nos hemos referido al linchamiento reporteril en otro artículo. Acosar, cortarle el paso, provocar al entrevistado para que pierda la compostura y salga la peor imagen de él, transformó a ciertos reporteros en una quinta columna o fuerza de choque en defensa del sistema imperante.
Esto ha pasado en la última marcha multitudinaria y silenciada por los medios venales, el 26 de mayo. Un reportero, preparado para el choque y la provocación, refugiando su identidad tras un casco de motociclista, me filmaba cuando hacía pintas con el lema NO A KEIKO. Lo que no sale en audio es la provocación deliberada: oiga, por qué pinta las paredes, oiga… Nuestra reacción primera fue rociarlo con el spray de pintura. Pero no contento con ello, el vil reportero al servicio del fujimontesinismo, insistió en perseguirme con la cámara por delante. Recibió un golpe y ahora dicen sus patrones que le rompimos el instrumento de trabajo.
Una explicación oportuna
Para empezar a darla, soy escritor y periodista. Así lo reconoce la conductora del programa que me acusa: Mónica Delta. He cumplido mis labores en diferentes medios de prensa y ahora estoy en cura de silencio por las razones antes expuestas. Por lo tanto, lejos está de mi ética agredir a colegas que cumplen con su trabajo.
La polarización de fuerzas en nuestro país, a puertas de las elecciones en segunda vuelta, que se definirán entre el candidato de Gana Perú, Ollanta Humala, y la candidata de la última dictadura que padecimos, Keiko Fujimori, ha trazado una frontera insalvable entre quienes defienden el estado de derecho y quienes pretenden facilitarle el paso a la impunidad de genocidas y ladrones. La candidata Keiko Fujimori goza del apoyo unánime de una prensa parametrada e incondicional, que no sólo silencia las noticias sobre el adversario, sino que une esfuerzos con los servicios de inteligencia que intervienen nuestros correos, facebook, teléfonos fijos y celulares. Y que quede bien claro: no nos intimidan las amenazas, porque todos saben que nos llegan puntualmente. Este matonaje periodístico que viene aparejado con las maniobras previas a un fraude electoral, también reclama su derecho a la inmunidad e impunidad.
En tal contexto puede entenderse mi reacción airada frente a una provocación. Bien dice un compañero mío en el facebook: si la prensa está en manos de canallas, entonces que hablen las murallas. Por eso pintamos lemas en los muros durante las marchas antikeiko. Y mientras pintamos, muchos reporteros de prensa internacional nos han filmado. Pero ninguno se atrevió a provocarnos, a cuestionarnos o a intimidarnos, como sí lo hizo el “agredido” de Canal 2 que refugiaba su identidad tras un casco de motociclista.
¿Mónica Delta puede acusarnos de algo?
Cuando nos identifica con nombres y apellidos, profesión y arte, y además se me dice “seudo-intelectual”, podemos decirle: es un honor viniendo de quien viene. La periodista Mónica Delta tuvo que salir del país después que la dictadura a la cual sirvió se desplomó por fuerza de la insurgencia popular y el pueblo peruano recuperó el estado de derecho. A diferencia de ella, muchos colegas periodistas e intelectuales, participamos en la Marcha de los Cuatro Suyos.
A diferencia de ella, muchos redactores fuimos purgados de los medios en los que pudimos habernos ganado el pan honestamente. A diferencia de ella, algunos de nuestros colegas fueron asesinados por los paramilitares y militares que cumplían órdenes del Pentagonito. Su colega, ¿periodista?, Aldo Mariátegui participa de esta campaña, tanto en TV como desde su pasquín Correo. No nos extraña que ambos envíen a un reportero, protegido previamente por un casco, a sabiendas de que iba a fomentar las iras.
Lo cierto es que he recibido adhesiones y solidaridad de intelectuales, profesionales, estudiantes y ciudadanos honestos, quienes aseveran que los representé a todos ellos en una sola actitud. En síntesis, los seres conscientes e inteligentes de este país repudian a la prensa parametrada por el fujimontesinismo, corrompida con los millones de las transnacionales mineras y de los dueños del poder económico. Su descarada campaña para que gane las elecciones la hija del exdictador, puede contar con lúmpenes reporteriles, genuflexos y serviles, pero jamás con un periodista que tenga un mínimo de ética.
No me molesta que desde las letrinas fujimoristas me tilden de "seudo intelectual". Escribo, luego existo. Enseño, luego existo. Lucho, luego existo. Milito, luego existo. Mi conciencia no está a la venta ni en alquiler. El ejemplo contrario lo pueden dar Nicolás Lúcar, Aldo Mariátegui, Mónica Delta y similares. Ellos siempre tendrán trabajo, bien remunerado, porque marchan al son de la comparsa de los dueños de grandes capitales. Yo marcharé siempre con la memoria de nuestros colegas asesinados en Uchuraccay, con el ejemplo de Pedro Yauri y de Melisa Alfaro Méndez. Ni el fascismo que tratan de instaurar nuevamente ni el matonaje servil de los lumpen-periodistas, podrán acallarnos. Escribo y escribiré siempre para un pueblo que lucha por su dignidad. Y preparamos desde ya una segunda Marcha de los Cuatro Suyos. Tengan la plena seguridad, epígonos del poder, cáfila de seudoperiodistas: ¡Venceremos!
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Escribe: Dante Castro Arrasco
El periodismo es algo más que una carrera universitaria. Así lo confirman quienes hacen periodismo sin haber estudiado en una escuela de Comunicación Social o incluso quienes, como el fallecido Manuel D’ornellas, decían que es el oficio de los “sin título”. Si revisamos biografías, constataremos que muchos buenos periodistas se hicieron tales en las salas de redacción de diversos medios. Ahora que abundan escuelas de comunicación en diversas universidades públicas y privadas, los egresados de éstas compiten en los medios con otros profesionales.
Pero el oficio de comunicador social se demerita cuando se pone al servicio del fascismo. Estamos asistiendo atónitos a la parametrización de los medios de prensa y a la subordinación de nuestros colegas para que acaten el rol infame de propagandistas de una sola candidatura: la de Keiko Fujimori, hija del ex dictador que purga condena en cárcel de lujo. El criminal violador de derechos humanos, de garantías constitucionales mínimas, el ladrón que ha saqueado a su antojo el erario nacional, no sólo tiene sucesora, sino también quienes escriban por él. Y más allá de la prensa escrita, quienes hacen programas de TV y radio, con el único fin de perpetuar a la mafia fujimontesinista torciendo la conciencia de millones de peruanos.
La dictadura de Fujimori y Montesinos inauguró una nueva era en el periodismo nacional: la de la prensa amarilla y de la TV basura. Los talk show y la prensa chicha a 50 céntimos pervirtieron al consumidor y efectuaron una lobotomía colectiva, de la cual ahora vemos sus efectos. No se nos diga que no actuamos. En 1998 hicimos una memorable protesta multitudinaria con todos los colegios de Lima, en plena dictadura, protestando contra este instrumento de dominación.
Queda bien claro que para hacer este tipo de “periodismo”, no se necesita ni talento ni profesión. Basta ser delincuente embozado y fingirse comunicador social. Hoy mismo, periodistas que no quisieron acatar el rol impuesto por los dueños de los medios donde trabajaban, han perdido el empleo. Otros, se sostienen en ellos bajo amenaza. Muchos están fuera hace tiempo porque se les niega el derecho a sobrevivir con aquello que sí saben hacer. Detrás de la máscara de la libertad de expresión, encontramos subempleo, subordinación, explotación y falta de derechos elementales para hombres y mujeres de prensa.
Provocadores y soplones a la orden
Decimos que la ética no funciona para aquellos que han confundido su rol de comunicadores sociales con el vil oficio de soplones. Delatar y provocar refugiándose tras una cámara, no es hacer periodismo. Ya nos hemos referido al linchamiento reporteril en otro artículo. Acosar, cortarle el paso, provocar al entrevistado para que pierda la compostura y salga la peor imagen de él, transformó a ciertos reporteros en una quinta columna o fuerza de choque en defensa del sistema imperante.
Esto ha pasado en la última marcha multitudinaria y silenciada por los medios venales, el 26 de mayo. Un reportero, preparado para el choque y la provocación, refugiando su identidad tras un casco de motociclista, me filmaba cuando hacía pintas con el lema NO A KEIKO. Lo que no sale en audio es la provocación deliberada: oiga, por qué pinta las paredes, oiga… Nuestra reacción primera fue rociarlo con el spray de pintura. Pero no contento con ello, el vil reportero al servicio del fujimontesinismo, insistió en perseguirme con la cámara por delante. Recibió un golpe y ahora dicen sus patrones que le rompimos el instrumento de trabajo.
Una explicación oportuna
Para empezar a darla, soy escritor y periodista. Así lo reconoce la conductora del programa que me acusa: Mónica Delta. He cumplido mis labores en diferentes medios de prensa y ahora estoy en cura de silencio por las razones antes expuestas. Por lo tanto, lejos está de mi ética agredir a colegas que cumplen con su trabajo.
La polarización de fuerzas en nuestro país, a puertas de las elecciones en segunda vuelta, que se definirán entre el candidato de Gana Perú, Ollanta Humala, y la candidata de la última dictadura que padecimos, Keiko Fujimori, ha trazado una frontera insalvable entre quienes defienden el estado de derecho y quienes pretenden facilitarle el paso a la impunidad de genocidas y ladrones. La candidata Keiko Fujimori goza del apoyo unánime de una prensa parametrada e incondicional, que no sólo silencia las noticias sobre el adversario, sino que une esfuerzos con los servicios de inteligencia que intervienen nuestros correos, facebook, teléfonos fijos y celulares. Y que quede bien claro: no nos intimidan las amenazas, porque todos saben que nos llegan puntualmente. Este matonaje periodístico que viene aparejado con las maniobras previas a un fraude electoral, también reclama su derecho a la inmunidad e impunidad.
En tal contexto puede entenderse mi reacción airada frente a una provocación. Bien dice un compañero mío en el facebook: si la prensa está en manos de canallas, entonces que hablen las murallas. Por eso pintamos lemas en los muros durante las marchas antikeiko. Y mientras pintamos, muchos reporteros de prensa internacional nos han filmado. Pero ninguno se atrevió a provocarnos, a cuestionarnos o a intimidarnos, como sí lo hizo el “agredido” de Canal 2 que refugiaba su identidad tras un casco de motociclista.
¿Mónica Delta puede acusarnos de algo?
Cuando nos identifica con nombres y apellidos, profesión y arte, y además se me dice “seudo-intelectual”, podemos decirle: es un honor viniendo de quien viene. La periodista Mónica Delta tuvo que salir del país después que la dictadura a la cual sirvió se desplomó por fuerza de la insurgencia popular y el pueblo peruano recuperó el estado de derecho. A diferencia de ella, muchos colegas periodistas e intelectuales, participamos en la Marcha de los Cuatro Suyos.
A diferencia de ella, muchos redactores fuimos purgados de los medios en los que pudimos habernos ganado el pan honestamente. A diferencia de ella, algunos de nuestros colegas fueron asesinados por los paramilitares y militares que cumplían órdenes del Pentagonito. Su colega, ¿periodista?, Aldo Mariátegui participa de esta campaña, tanto en TV como desde su pasquín Correo. No nos extraña que ambos envíen a un reportero, protegido previamente por un casco, a sabiendas de que iba a fomentar las iras.
Lo cierto es que he recibido adhesiones y solidaridad de intelectuales, profesionales, estudiantes y ciudadanos honestos, quienes aseveran que los representé a todos ellos en una sola actitud. En síntesis, los seres conscientes e inteligentes de este país repudian a la prensa parametrada por el fujimontesinismo, corrompida con los millones de las transnacionales mineras y de los dueños del poder económico. Su descarada campaña para que gane las elecciones la hija del exdictador, puede contar con lúmpenes reporteriles, genuflexos y serviles, pero jamás con un periodista que tenga un mínimo de ética.
No me molesta que desde las letrinas fujimoristas me tilden de "seudo intelectual". Escribo, luego existo. Enseño, luego existo. Lucho, luego existo. Milito, luego existo. Mi conciencia no está a la venta ni en alquiler. El ejemplo contrario lo pueden dar Nicolás Lúcar, Aldo Mariátegui, Mónica Delta y similares. Ellos siempre tendrán trabajo, bien remunerado, porque marchan al son de la comparsa de los dueños de grandes capitales. Yo marcharé siempre con la memoria de nuestros colegas asesinados en Uchuraccay, con el ejemplo de Pedro Yauri y de Melisa Alfaro Méndez. Ni el fascismo que tratan de instaurar nuevamente ni el matonaje servil de los lumpen-periodistas, podrán acallarnos. Escribo y escribiré siempre para un pueblo que lucha por su dignidad. Y preparamos desde ya una segunda Marcha de los Cuatro Suyos. Tengan la plena seguridad, epígonos del poder, cáfila de seudoperiodistas: ¡Venceremos!
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14 comentarios:
Denuncia: Atento Rodolfo Ybarra, Dante Castro, Rafael Inocente:
En habla el pueblo en en canal han denunciado que los de fujimori estan capacitando a los personeros de ellos mismos para que se presenten por Ollanta y asi se lleven los resultados su partido,osea que van hacer guerra SUCIA,a tener CUIDADO con ellos,a GANAR OLLANTA,queremos un CAMBIO.
Pero si todos saben que Dante Castro es un matón de pandilla, que nunca enfrente 1 a 1.
DANTE CASTRO ES UN ESCRITOR DE CUÑO Y PREMIADO EN EL EXTRANJERO. ESTO ES UNA OFENSA A LOS ESCRITORES DE A PIE.
ADELANTE DANTE CASTRO, EL PAÍS ES NUESTRO Y HAY QUE TOMARLO!!!!
RUBÉN PANTA AGUIRRE
Excelente, Dante Castro. De Mónica Delta se puede esperar cualquier cosa. Lo que ella debería explicar es, más bien, la relación que tuvo con Shultz en la época más oscura del fujimontesinismo. Pero quiero aprovechar este blog que ha demostrado tener, más allá de su línea editorial, una gran apertura para recibir todo tipo de comentarios, para publicar una réplica a un comentario que se hizo a un artículo publicado en el Utero de Marita. El artículo es sobre el caso, mil veces reabierto, Madre Mía, y en el que un tal Roggissey Melmoth lanza un comentario, el cual, me parece, merece una réplica. Lamentablemente mi réplica nunca salió publicada. Yo pensaba que la censura se daba solo en los canales de TV y en las radios, pero también se da en algunos blogs. Esta es mi réplica, y para leer el comentario del tal Roggisey M., pues accedan al Utero de Marita.
Lo que dice Roggissey M. en su comentario es interesante. Pero no solo es interesante lo que dice, sino la forma en que lo dice (o en que lo escribe, en fin). Y digo esto porque no era necesario contar la historia del universitario post-paja para llegar a las conclusiones a las que llega, Es evidente que el tal Roggissey es un buen lector, que seguramente ha seguido un taller de narrativa, y que ha puesto su talento para desprestigiar a quienes hemos decidido apoyar, con muchas reservas, a Ollanta Humala. Se aprecia un eficiente dominio de las técnicas narrativas, con el fin de manipular al lector (de eso se trata). Pero el mecanismo es demasiado obvio, salta a la vista. El engranaje suena demasiado. En otras palabras, lo que quiere R.M. es decirnos: Vean, Fuerza 2011 está lleno de violadores de DD.HH., pero Gana Perú, también. Conclusión, los dos son la misma basura y, por lo tanto, no importa por quién votes. Pero el caso es que Ollanta ha sido procesado y su caso archivado. Y el nuevo testigo (el as bajo la manga que aparece, oh sorpresa, junto a un nuevo Wikileaks publicado, oh sorpresa, por el imparcial diario El Comercio. ¿Has escuchado, Roggissey, sobre el Plan Sábana?) ha caído en contradicciones (tal como lo demostró Rosa María Palacios). Lo que sí se ha demostrado es que el nuevo y oportuno (oportunista, sería mejor) testigo es un conocido ladrón. Eso sí está demostrado. Por tanto, comparar una maquinaria mafiosa, dispuesta a robar y a matar por los propósitos más venales, no se puede comparar con un soldado que no hacía otra cosa que cumplir con su deber, y que no se ha demostrado que haya sido un violador de DD.HH. Hacer esa comparación demuestra la mala fe y la mala entraña de quienes apoyan la candidatura de la china que es hija de un ladrón y asesino (esto está probado, no es una especulación), que dice (y eso está registrado) estar muy orgullosa de ser la hija de un ladrón y asesino. Para terminar, ya que Keiko está caída de intelectuales que apoyen su causa, sería interesante R.M. que apoyes públicamente a Keiko, que dejes esa falsa imparcialidad y te la juegues por tu candidata. Creo que eso sería muy interesante. (JS)
"Un pseudo periodista ataca a Dante Castro" Super objetiva la nota. O sea que una marcha pacífica debe dedicarse a pintar las paredes de la ciudad. Ya. Interesante. ¿Y luego quién limpia eso? ¿Dante Castro? ¿Los comunistas de Humala? Estamos terriblemente malacostumbrados a que una protesta nos da derecho a hacer lo que nos dé la gana y a cagar el patrimonio de la ciudad. Un patético "descargo" que no justifica una actitud matonesca.
El spray usado casi como insecticida es importante: Uno, para la prensa burguesa, porque así puede desvirtuar una marcha y el mensaje de ruptura que usa los métodos más simples de comunicación: las pintas, los volantes, los gritos en las calles, la misma "propaganda de hecho" (es decir, la misma manifestación y sus miles de asistentes). Dos, para el pueblo, porque el hecho (la "falta" de Dante Castro) demuestra que no es que ellos (los "periodistas") cuiden los muros y las paredes del "centro histórico", sino que lo que ellos cuidan --y lo pueden comprobar en la prensa, radio y television-- es que la verdad no sea expuesta ni por asomo.
Y, en efecto, la actitud matonesca del canal no se puede justificar.
Estimado Rodolfo,
Mi solidaridad con Dante Castro. Nadie tiene derecho de ningunearlo así.
Algo que sí parece incongruente es esto:
Castro se define como periodista y escritor. Líneas después dice que está haciendo “pintas”.
¿Estaba haciéndolas en la pared de su casa o en una pared que no le pertenece?
Creo que atenta contra la propiedad privada pintar paredes ajenas. Hacer un cartelito y pancarta es una cosa.
Si él es periodista y escritor y hace “pintas” en cualquier pared, ¿qué se le puede pedir al ciudadano común?
Pintar paredes en ciudades más organizadas que nuestra Lima caótica es considerado vandalismo.
Si criticamos cuando una barra brava pinta paredes, si nos molesta cuando alguien pinta nuestra pared con slogans políticos, ¿cómo hacemos una excepción con estas “pintas” que hizo Dante Castro? Entiendo la rabia de Dante por el tema de Keiko y su encarcelado padre.
Imaginemos que yo pinto la casa de Dante Castro protestando contra una dictadura o contra a que fuera. ¿Qué pensaría él?
Ahora bien, sin ponernos patrioteros. Limpiar la pintas del Centro Histórico sale del bolsillo de todos nosotros, ¿cierto? Dante Castro al hacer “pintas” afecta a todos los contribuyentes.
Dante dice que el Municio ya borró las pintas y tranquilos nomás. ¿A quién le cuesta esas horas-hombre?
De acuerdo con Castro en que las pintas son usuales en las manifestaciones, pero en el tercer mundo nomas. En cualquier país “civilizado” es vandalismo.
Me parece que hace poco Dante Castro estuvo incursionando en política, ¿verdad?
Es decir Dante Castro estaba en política, literatura, periodismo, y pintas de paredes.
Algo muy ecléctico, ¿verdad? pero igual, condeno el trato despectivo de cuál ha sido objeto.
Debería Dante Castro optar por el camino intelectual para enfrentarse a Mónica Delta. Que la rete a debatir o que le escriba una carta pública .Creo que muchos escritores firmarán dicha carta. Una carta de solidaridad vendría bien.
Dante está correcto en su derecho de protestar. Creo que se equivoca en la forma. La cita del Che Guevara es anacrónica. El Che fue, aunque le duela a muchos, un tonto útil del dictador Fidel Castro. Si aceptamos que lo de Fujimori fue una dictadura, lo de Fidel Castro lo es también. ¿Cierto?
Si criticamos a los periodistas y aquellos que simplemente obedecen, entonces el Che seria también alguien que simplemente obedece y acata a un militar. ¿Desde cuándo un intelectual tiene admiración por un militar? El Che era un militar: tenia uniforme del ejército Cubano.
Tonto útil es aquel que va a pelear una guerra mientras su jefe bebe ron cubano. Décadas después de la muerte del querido Che, la revolución cubana sigue en “marcha”.
Un abrazo,
Hemil
La pobre diabla que califica a Dante Castro de pseudointelectual seguramente desconoce cualquier libro suyo. Es más, es probable que esta mujer hable de hambre y no pase del bufón Bayly entre sus lecturas. Es conocido que estos reporteritos chinean pa su combi y se venden por un combo del Bembos. Así son, éstos.
Y los "principistas" que se "aruñan" por el "vandalismo" y por los "contribuyentes" que pagan luego la limpieza de las paredes afeadas por los protestantes, viven en otro país. Si Lima es una cagada, compadre, Lima es fea, sucia, corrupta y desordenada.
Cuando sales a las calles de Lima, nada está en orden. Desde el tombo que te detiene el auto sin ningún motivo para robarte cinco soles hasta los delincuentes chóferes de combi que obstruyen el tráfico porque les da la gana, eso es vandalismo y eso lo pagamos todos los contribuyentes, ¿por qué no escribes sobre eso en vez de indignarte por una pinta que reza NO A KEIKO? Cuando el pueblo sale a protestar y se desborda y demuestra su rabia frente al sistema, los "principistas" hablan huevadas.
Huevadas como la cojudéz que ese trío de papanatas han eyectado hace unos días, una carta dizque de rechazo a la carta firmada por más de cien escritores peruanos de las más encontradas vertientes ideológicas (nunca antes se ha visto eso, ¿por qué será no? ¿liberales connotados junto a “conocidos prosenderistas”?¿todos se volvieron locos?), una carta INCOHERENTE por donde se le mire (como señala Martín Roldán a Gabriel Ruiz Ortega), una carta del avestruz, una carta de quien prefiere mirar para otro lado mientras sus hermanos se matan entre ellos, una carta de los cobardes, de los que repiten todos son iguales, todos roban, todos mataron, ya verán cuando salga Humala, uy qué mello. Ese tipo de actitudes solamente reflejan a alguien que fue fujimorista y que hoy se HACE AL COJUDO, a alguien que defiende "lo bueno que hizo Fujimori" o simplemente al mediopelo limeño, ese que se enorgullece de no salir de Surco o Miraflores y esconde su racismo a flor de piel con ropita étnica.
Si Ollanta traiciona va a encontrar con una muralla humana nunca antes vista en el país, una muralla que de una patada en el poto lo pondrá en su sitio. Pero, ay de nosotros si la Hija del Asesino y su pandilla, organizada y digitada desde la cana por Fujimori y Montesinos, se hace del poder nuevamente.
Ayer Belmont (a propósito, ver el programa de Alexander Saco a las 1130 pm, "YO ACUSO") ha denunciado FRAUDE ELECTORAL. Este fraude viene gestándose desde hace mucho tiempo, desde que el APRA llegó al poder por segunda vez. Pero los señoritos mediopelo, esos palurdos que se arañan por las supuestas violaciones a DDHH cuando estábamos en guerra, prefieren mirar a otro lado y contribuir así a que una maldita pandilla de delincuentes y asesinos se posesione nuevamente con el poder.
La próxima semana, cuando el FRAUDE ESTÉ CONSUMADO, quiero verles las caras a esos señoritos que prefirieron hacer de quinta columna en vez de salir a lanzar su grito esperanzado o estampar una pinta en las calles de Lima, la Ciudad de los Culpables.
Rafael Inocente
PD: El reporterito que, escondido bajo un casco de motociclista, hostigó a Dante Castro sólo recibió su merecido. Lo único que critico a Dante es no haberse premunido de varias puntas para que le cubran las espaldas.
PD 2: Sería interesante que la Mónica Delta, cortesana de Alan y verguenza del periodismo cholo, así como sus reporteritos hambrientos, hostiguen con la misma mala fe a los candidatos que enmierdaron la ciudad con PINTAS, CARTELONES, AFICHES, LETREROS. Pero cuando un hombre del pueblo como Dante Castro coge un spray y pinta un honesto NO A KEIKO, se convierte en pseudointelectual, maleante, matón e incivilizado que no tiene en cuenta que "con nuestros impuestos" la Municipalidad pagará los platos rotos.
AGGGGG, EXCELENTE DEFENSA DE INOCENTE AL KUMPA DANTE CASTRO. NO HAY DE OTRA, Y COMO DICE EL YBARRÓN: "O VOTAMOS POR HUMALA O NOS VAMOS POR EL WATER".
Compañero escritor: Rocío Silva Santisteban ha dicho esto: "Pepe, sobrino, el del spray siempre ha sido así: lo conozco desde hace 30 años y es un fosforito que no ha sabido envejecer, cree que sigue siendo el Rambo de los años 80 sanrmarquinos. Pero acá cometió la doble estupidez de echarle spray a un canal de televisión y de hacerlo en el marco de una marcha pacífica. Su estúpida acción, irresponsable y agresiva por las puras, ha empañado una marcha de miles que ha sido creativa y pacífica. Todos los canales estaban esperando eso. Yo misma comenté a Canal 2 que repudiábamos cualquier acción agresiva contra la prensa, pero eso sí que no lo sacaron..."
http://www.facebook.com/rocio.silva.santisteban/posts/165958090135622
Bueno de Rocío, puedo esperar mucho sobre todo comentarios de esta naturaleza, siempre nada solidarios. En cuanto a Dante Castro, por ser Dante Castro se le presta atención, xq que yo sepa él no ha pintado todo lo que ahora hay en el camino de la marcha y de hecho la gente de mi universidad y quienes integraban parte de la marcha tb estaban haciendo pintas y no me araño x eso... si les duele tanto su patrimonio cultural x una pared que luego se lija y se pinta ( como todos los años que se les da un retoque) xq no van ha lijar los que tanto lloriquean x una de las tantas paredes pintadas del centro cívico. Y si el señor de la cámara, acaso no quería provocar xq fue con casco de motociclista? estaba preparado para la pelea acaso? El señor de camarógrafo de canal 2 no es un enviado del cielo o algo diferente a cualquier ser humano, si alguien te molesta acaso no reaccionas? así que él el responsable por su material de trabajo, por exponerlo y ser un periodista provocador. Creo que el "periodista" se olvidó de su labor que es pasar noticias y dejó libres sus pasiones por ser serenazgo o policía. ese día habían policías y no estaban ocupados en nimiedades... teniendo en cuenta que habían cosas como una provocación fujimorista y un orate con un sable corriendo ( que luego detuvieron)... eso sí no pasa por canal 2.
Solidaridad con Dante Castro:
Compañeros, el país está siendo arrastrado al matadero y lo que nos queda es hacer fuerza común e intentar la unidad. No atacarnos entre nosotros, por lo menos hasta después de las elecciones (en las que creo cada vez menos y hasta tiene el sabor y el color del “Tang”). Quiero dejar en claro, que yo sí apoyo a la protesta popular y todos los mecanismos que puedan hacer frente al aparato mediático, secuestrado por la plutocracia y todos esos cojudos que se quieren dar ahora de “demócratas”, de "amantes del país" o cualquier cosa con tal de ganar votos.
El compañero Dante Castro ha sido atacado por un seudoperiodista, y sindicado como “barra brava” y “seudointelectual”, aparte de querer implicarlo en la destrucción de una cámara filmadora (lo que significaría un proceso judicial y una situación engorrosa que podría degenerar en algo peor. Ya la “señora” Keiko, la hija del ladrón y asesino, ha dicho que las leyes serán fuertes, incluso para los que roban celulares. El peligro es inminente).
Es un deber moral darle nuestro respaldo al escritor Dante Castro y cerrar filas ante este avance del desagüe mediático, reflejo del aprofujimontesinismo y del Estado putrefacto que pone sus garras en los hijos del pueblo para frenar todo avance popular y desviar la lucha histórica de los oprimidos condenados al hambre, la miseria (física e intelectual) y la desinformación.
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