jueves, 27 de diciembre de 2012

'SECRETO DE ESTADO':

Mi nouvelle 'Secreto de Estado' ha sido incluido en 'Los mejores libros del 2012', de Ricardo Gonzáles-Vigil. Por cierto, un lector me hace recordar que el año 2000 'Por la boca , Muertos' (escrito a tándem entre este SS y Gonzalo Portals Zubiate) también fue elegido como mejor libro de aquel año. Seguimos.

 

'BROZA', DE SANDRA SUAZO




Broza es o son los desechos de las plantas, las hojas secas, las semillas, las raíces o nervosidades que por una u otra razón se han desvinculado de la matriz-madre o cuerpo origen. Broza también juega y rima con rosa o sabrosa, a pesar de que, en esta última palabra, el origen es latino y no gótico como en el caso de broza o brukja, despojo, desecho, detrito. Por lo tanto, debemos entender que este Broza-poemario son los desprendimientos verbales que la poeta ha querido y quiere entregarnos, algo que es muy suyo y cuya lectura tiene que significar necesariamente una aceptación como el pecador acepta la hostia para redimirse con su creencia o como el viajante o mochilero acepta la visa para extrañarse de su lar-natura y permitir darse un paso a un mundo que no es el suyo dejándose llevar por las vicisitudes del espacio-tiempo y la incertidumbre. Pero, cuidado, la poeta no deja sus ramas o sus flores al libre albedrío o la caída libre, y, definitivamente, no es el viento el que arrastra y barre sus despojos: hay una intención por dejar en claro que no son solo palabras, versos, prosas o hibridaciones que se van por su lado y toman su camino, hay una objetualización de la imagen, una necesidad de que el lector toque los textos o se coja de una serpentina para ser arrastrado justo a ese lugar (sobre esto explicaré al final); para los que hayan leído-palpado-examinado-armado o desarmado su Papiroflexia (Lima, 2008), su primer libro-cocotológico, les será fácil entender que la búsqueda aquí es geométrica y tridimensional, los planos superpuestos requieren de un artificio, de una preparación y, a pesar de que las líneas marcadas del desarmado poliedro nos ayuden a retornar a la forma original, el asunto no es muy fácil, y muchos pierden la batalla y se quedan con el papel extendido en rigor mortis como si de un cadáver se tratara, pero en la poesía como en la materia todo busca su estado de reposo hasta que el equilibrio, por una u otra razón, se rompe.

Y esta es quizá una de las primeras cosas a las que se remite en Broza, en el que el lector acucioso recogerá el ramillete para retornarlo a la vida o lanzarlo al éter para que encuentre su camino: “Para deshacerte/cada vez de quién sabe/qué aparato minúsculo/sacado de tu maleta:/botón, llave, clavo/diente, etc.;/ retornaba a casa/ligero pero cansado./ Un día de esos/reconocí tus cabellos/enredados/a una malla de metal/ caminando por la costa verde/verde viento, verde carne/los cogí,/ los guardé,/ los acaricio de vez en cuando/ también los dejo caer desde el malecón”. He ahí una forma de dejar que todo siga su curso como en las aguas de Heráclito o en los universos paralelos o mundos múltiples de Hugh Everett , donde todo sigue existiendo y moviéndose en corriente alterna, peristalsis o hertzianamente a pesar de que algún elemento se haya detenido o haya encontrado momentáneamente su estado de reposo, donde la muerte en su degradación biológica es también movimientos de células que se renuevan en la extinción o hacia la extinción.

Pero no nos alejemos de Broza. Contrariamente a la acostumbrada poesía de la mujer y sus hormonales efluvios y tentativas, los recorridos caminos del eros y las ondulaciones del cuerpo de la mujer, encontramos en Sandra Suazo un cuadro muy delicado y muy sutil del drama social, imposible de pasar por alto, inclusive más allá del elemento de género: “Un ejército de mujeres que del crepúsculo llevan la cadencia, el traje, los años (nada vergonzantes), huérfanas de tierra donde recostar sus cabezas donde descansar los huesos demoran el paso de hombres, mujeres y bestias presurosos y perfumados, interrumpen piadosamente el sueño de animales nocturnos perdidos bajo el sol. Ni todo el polvo del mundo podría cerrarles los ojos pero llevan a sus bocas un poco de tierra de esta, su dulce ciudad”.

La marginalidad como resultante del tráfago mundo-sociedad-afectos-sentimientos, una marginalidad que proviene de la literatura, de los clochards o mendigos que se aman en el trasfondo de las paredes, en el hontanar de los parques o quizá en los bares donde el susurro al oído puede ser una declaración de amor: “Y no es extraño que la gente se pregunte qué haremos, noche en ciernes merodeando como estamos sus carnes olorosas a cardos encendidos a leguas de distancia. Nada es extraño, entonces las cuentas desperdigadas retornan a esta mano que las toma hasta pulverizarlas y convertirlas en la tierra misma que habita nuestras pieles”.

La memoria despierta también tiene espacio para la volución de lo ausente o la regurgitación del tiempo pasado donde se pudo ser feliz o alcanzar la ataraxia filosófica o algún otro estado de contemplación o elevación de tetrahidrocannabinnol u otro expansor de la conciencia a lo Huxley: “Las monedas caerían desde abajo/Desde los bolsillos de cobradores/Desprevenidos/Hacia el otro lado,/Atravesando las rejillas/Que ventilan los sótanos sin fondo./Recuerdas cuando tus padres/Volteaban todas las esquinas/Dejando un reguero de música/Que encendías con cada wiro./Aún los veo/Pero es un poco tarde/Para hacerse invisible/Para huir tras las rejillas/Y colarse en otras aceras,/Otras avenidas/Hasta encontrarnos en el límite/De la tarde retumbante/Entre la gente ausente/Que insiste en sacudir/De pie/Sus sombras/Al pie de las avenidas/Lenta, vorazmente/Acariciando la faz, el envés/De la tierra bajo las suelas/Bajo la piel.” (pág. 27).

Y, claro, como tenía que ser, ella misma se convierte en Almea, la mujer que despliega versos y le canta a un mundo derruido en la hojarasca: “Crece el fango sobre la punta de tus pies/crece y crees/que quizás/ya es tiempo de quitar la maleza y quemarla/como a esta hoja de papel./Almea si te detuvieras un instante/ni tus cuerdas vocales,/ni todo el polvo de la ciudad/dejarían de vibrar.” Sin embargo, la vibración de Om ya es un canto en sí mismo (o en sí misma), y no es necesario explicar que la poeta ha alcanzado su propio coro angelical con trompetas de Jericó que se elevan del fango, la sanguaza, el humus y se arrastra con la hojarasca, las raíces y el aliento de los silvios resoplando los oídos y los rostros asombrados de los transeúntes. Y ni siquiera el heraclitiano Yawar Mayu podría responder: “¿Qué cosa corre a toda prisa entre tus huesos?/Fugaz chasquido de dedos/eterno danzar al borde del abismo.”. ¿Y acaso —hago la pregunta de rigor— el abismo no es uno mismo?

Pero Suazo insiste en la escritura a clavo y martillo o con la delicadeza de quien da de comer a las palomas, las acaricia, las hace volar, revolotean en sus manos (aún cuando nos multen por hacerlo o contribuyamos a la clisteifobia, porque jamás una paloma podría ser una “rata con alas”), de quien se entrega en solidaridad aun cuando solo encuentre ingratitud: “Extiendo las manos/y ofrezco/Pedazos de pan dibujados/En la palma y en los dedos./Aves de picos agudos/ incrustan en mí,/Dulcemente sus trinos.” (pág. 33).

Y quizá por eso la intromisión de la Beatriz dantesca sea algo más que un aparecimiento gratuito: “En calma, sanciona severa cuanto acapare su vientre, desenhebra leguas dormidas, insomnes/serpientes que carecen de tino; tanto dado a traslucir vano, viscoso, pegado a uñas y dientes, tanto tedio por acariciar y deshacer.” (pág. 35).

O se vuelve solo el rocío que brota sobre las hojas de los días como impertérrita aparición y muestra farmacológica de la fragilidad de la vida: “A los transeúntes/aconseja en voz baja/los charcos de estiércol/iluminados,/evitar,/dejar los abrigos,/descalzarse,/e ir contra el viento/en dirección al mar/al río/o al centro de las avenidas/inundadas de atavíos metálicos/que retorcer con la sola quietud.” (pág. 37).

En “Anónimos” todo es y no es, la palabra ha alcanzado la altura que el viento o la presión atmosférica le ha permitido y la broza es ya una realidad que nunca se irá de nuestras manos: “Desde esta línea se agotan/jinetes con sombreros de día/huyen de los entierros/de sus madres-hijas/hasta el centro de sus propios ojos/seres extáticos/pequeños/con caras lavadas a prisa/presos de sueños brumosos/entierran sus maletas y sus nombres/se cubren con todos los dedos las orejas.”.

En “Fragmentos” no son solo los retazos de textos de un texto mayor, sino los pedazos de la corteza o del detritus develado en los que la poesía alcanzó su nido, su delicadeza conservada en formol: “Materia infame/que alguna vez/viajó junto a los hombres/y, extraída de sus propios pechos,/sin violencia,/fue arrojada a los vientos/perdida entre las eras.”.

Y, al final la calle, una en especial, La Amargura, en la que como en una foto de Man Ray o en un cuadro de Bastiat quedará la imagen de que la poeta nos ha permitido ver por la rendija o de refilón esa broza muy suya y en la que poco a poco nosotros mismos nos iremos convirtiendo: “Sin número/sin puertas/sin inicio ni fin/perdiéndose como los pasos/de un guardia de seguridad/en dirección al río/al borde del oficio/perdiéndose como monedas/en el teléfono público/sin cambio/sin voz al otro lado del hijo”.

Y cuya belleza sinfónica, belleza del concepto, no tendría otra forma de terminar sino dejando una seña cuya interpretación o hermenéutica nos podría ocupar tranquilamente varias páginas, cuestión que me reservo para una próxima tentativa en esta nueva broza de la que ya somos parte: “guardarse uno dentro de sí mismo/hasta nuevo aviso”.



COTA O SERPENTINA

Atención: el libro viene adherido a un fragmento de serpentina en la que se indica con letra a pulso: “Pisa esta tierra con humilde ferocidad”. O sea, lector macho, hembra, hipócrita, solidario o vil, no escatimes en la broza u hojarasca que rueda en la vereda, solo camina por encima de ella y lee, si puedes, lo que aparece en cada nervadura de la tierra.

La poeta te lo agradecerá.




 

domingo, 16 de diciembre de 2012

PRESENTACIÓN DE 'PAMPA DE PERROS', DE JOHNNY BARBIERI




NOTA DE PRENSA

Pampa de perros
(Novela)

Pampa de perros, nos sumerge en esa deplorable exaltación de la candidez humana, donde las historias recurrentes, guardan algo de esa magia de lo cotidiano que no pierde su encanto a pesar de la abrupta y cruda realidad que aguarda a los personajes, así el mundo marginal de los recicladores, del abandono familiar y la violencia de la cárcel cobran vida en manos de un alarife de la palabra, Johnny Barbieri, un convencido de  las muchas respuestas que nos da la literatura.

Pedro Perales

Casa Barbieri Editores nos presenta la primera novela de Johnny Barbieri, “Pampa de perros”. Se conocía a Johnny Barbieri como poeta, hoy se le conoce también como narrador. Sorprendió  su relato “Coloretes” (Ediciones Copé, 2007) y su libro de cuentos “La edad de oro” (Casa Barbieri editores, 2010), esta vez nos hace entrega, para sorprendernos aún más, su primera novela Pampa de perros. La vida dura de un niño que, bajo las fauces de un mundo implacable, tiene que hacerse hombre en medio de una desesperanza que lo flagela. Ama y se equivoca como muchos, y cede al infortunio que, al parecer, lo había marcado desde un comienzo.

Como presentadores estarán: Pedro Perales, Leoncio Luque y William Gonzales.
Y como antesala a la presentación de la novela estarán compartiendo sus poemas: Domingo de Ramos, Indira Anampa, Micaela Gonzales, Nora Alarcón, Teresa Cabrera, Yoshi Sotomayor.

La cita es este miércoles 19 de diciembre a partir de las 5:30pm en la Biblioteca Pública de Lima / AV. ABANCAY 4ta CUADRA – LIMA

ORGANIZAN: Biblioteca Pública de Lima, Casa Barbieri Editores y Letra Suelta Cultural.



Johnny Barbieri (Lima, 1966) es poeta y narrador. Hizo estudios en Lengua y Literatura en la Universidad Nacional Federico Villarreal y Sociología en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. En 1990 fundó la agrupación poética Noble Katerba. Además integró en 1995 el grupo nihilista La Mano Anarka. Sus poemas han aparecido publicados en diversos diarios, revistas y páginas web del Perú y del extranjero, así como en diversas antologías poéticas.
Ha publicado los siguientes poemarios: Branda y la Mesón de los Pandos (1993), El Libro Azul (1996), MAKA (1999), Jugando a ser Dios (2000), Carne de mi Carne (2002),  La Virgen Negra (2003), Libro Hindú (2005), Yo es otro (2007),  La Edad de Oro (2010, cuentos), Corazón de abril (2011) y Pampa de perros (2012, novela).
Obtuvo el Premio Nacional de Educación HORACIO 2003 y el premio de poesía Taiwán 2011. Hizo una Maestría en Literatura Peruana y Latinoamericana en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Ha participado en Encuentros Internacionales de Poesía en Perú, Chile, Cuba, México y Colombia.


INGRESO LIBRE

Se agradece la publicación.

Johnny Barbieri
http://casa-barbieri.blogspot.com/
http://noblekaterba-nk.blogspot.com/

viernes, 14 de diciembre de 2012

SECRETO DE ESTADO

 Los créditos de la foto son de Juan Carlos Michilerio.

Todas las gracias a todos los que asistieron a la presentación de SDE. Pronto estaré en provincias. Atención Chiclayo, Piura y Tumbes. Nos vemos pronto.

sábado, 8 de diciembre de 2012

SPOT PUBLICITARIO DE NAVIDAD


(La foto es de hace un año, pero tal parece que nada cambia en la realidad retiniana de este país).

Navidad de los ahorcados en guirnaldas, “merry Christmas”. Navidad de risueños elfos, globitos rojiverdes, humo de chicharra y asaltabancos con ropa de Santa Claus. Navidad de los Reyes Magos
 mariguanos y borrachos hurgando en la basura. Navidad de las marías magdalenas y las vírgenes marías abusadas, extorsionadas y golpeadas por el proxeneta. Navidad del atrezo, escenografía y coreografía solo para compradores, tarjeta plateada, dorada o cheque al portador. Navidad meteórica e indigesta con opíparos manjares para los que huelen y/o esnifan los televisores plasma en un centro comercial. Navidad para los que patean latas y tienen que recoger del suelo o del subsuelo lo que se le cae a los que sí pueden comprarse alguito aunque sea un DVD home theater coreano en 100 cómodas cuotas o comida para perros o gatos, también en 100 cuotas. Navidad de arbolitos de freón, luces psicodélicas y trineos o carrozas en las puertas de sus casas. Navidad de nacimientos con pesebre, vacas, renos y ovejas de tamaño natural para la gente linda de Eisha. Navidad Sal de Andrews, leche Mylanta, Viagra, antioxidantes, Hepabionta y retrovirales. Navidad negativa en retro y en rojo como sangre de menstruación, sangre de tebeciano, hemofílico o suicida que ya no aguantó más. Navidad con tos de asmático, tembladera de epiléptico, flema, balón de oxígeno y camilla de ambulancia. Navidad de las rebajas, los remates, los “dos por uno”, los “tres por uno”, los “cinco por uno” y las estafas a justiprecio, para alcanzar la desesperación, antes de que nos atrape la vejez, el párkinson, la arterioesclerosis, la demencia senil o todas las anteriores. Navidad de los que han perdido sus ganancias en las oficinas de la Sunat o del banco a plazo fijo, ese que sonríe con la señorita escort cuando te hipoteca la casa y te da una patada en el culo por “moroso y mal pagador”. Navidad de los hijos de puta de los cárteles de la droga y de los hijos de puta de los vendedores y compradores de armas y demás hijos de puta barones de la guerra. Navidad de los hijos de puta de los neofascistas, neosionistas, neodemócratas y neomalthusianos apoyados por el capital nativo y la Bolsa de Valores de Lima. Navidad de los hijos que lloran día y noche por el juguete que nunca tendrán o por el estómago que nunca podrán llenar. Navidad de los profesores, médicos y jubilados, a quienes el Estado les escupirá 100 soles y las “gracias por los servicios prestados”. Navidad de los pirañas, choros y pastrulos que al menos soñarán que vuelan en un globo de gas o que pierden la cabeza en un lance de dados. Navidad de los taxistas piratas, con el carro del abuelo, sin Setame, sin frenos, ni cinturón de seguridad. Navidad de los policías que extorsionan a medio mundo y te ensartan la rifa dizque para apoyar a la comisaría y ser cada día “mejores ciudadanos”. Navidad de los ambulantes en carretas de fritangas y langoy para las grandes mayorías. Navidad de los provincianos jodidos, explotados, encadenados de las patas en fábricas clandestinas con RUC, ISO, licencia de la Digesa y el Ministerio de Trabajo. Navidad de los cachineros, ropavejeros y recicladores que le darán un uso productivo al refrigerador viejo o al mueble o a la mesa apolillada de la aburrida clase media. Navidad de los politiqueros que se tomarán la foto precisa o Photoshop con la sonrisa Kolynos al lado de un niño de Pamplona, La Parada o el cerro San Cosme. Navidad de las bebidas energizantes, té de ginseng para adelgazar, chocolate espeso y panetón neumático. Navidad del pollo, pavo, pavipollo, cuy, conejo, cabrito o chancho engordado a patadas. Navidad de los toribianitos y los villancicos aullando con lágrimas de cocodrilo. Navidad del Inabif con sus casas de torturas y pantomima social para quedar bien con todos. Navidad de tarjetitas Unicef para las viejas pitucas de oenegés que usan desinfectantes de mano y salen en los publirreportajes de la revista Hola. Navidad del Club de Leones y la Fundación por los Niños del Perú. Navidad de las pseudofeministas que le darán el día libre a sus empleadas domésticas “por Noche Buena”. Navidad multicolor del orgullo gay, grupos lésbicos, transgéneros, homosexuales y transexuales que exigen a la madre natura y al Poder Judicial la oportunidad de criar a un hijo. Navidad de los pederastas de la Iglesia católica que tocarán las campanas impacientes por la misa de gallo. Navidad de los mendigos y demás millones que no pueden completar la canasta básica familiar. Navidad de los obreros y mineros a quienes les descontarán el aguinaldo con el cuento de “felices Pascuas y próspero Año Nuevo”. Navidad de los anunciantes sin escrúpulos y comerciales de mala gracia, donde un bebé rollizo se convierte en objeto de deseo, mercancía y carne de cañón. Navidad de los que no tienen nada que perder y se arrojan a los carros aunque sea para tener una cama caliente en el hospital. Navidad cojuda y acojudante. Navidad de sudoku, crucigrama y pentagrama. Navidad de locos calatos y señores con terno de marca Armani. Navidad del “sufre, peruano, sufre”. Navidad de las pobres Apafa y escolares sin zapato. Navidad de los barrenderos y baja policía que limpiarán las calles luego de la hemorragia mercantilista. Navidad retiniana y risa impostada de Magaly Medina, Gisella Valcárcel, Los chistosos, Al fondo hay sitio, La reina de la carretilla y Combate. Navidad de los que sí pueden darse un viajecito a Orlando, Miami, o al Triángulo de las Bermudas. Navidad de los broadcasters de Baruch Ivcher, Shultz, Delgado Parker y los Miró Quesada. Navidad vip de Roque Benavides, Grupo Romero, Grupo Brescia y Grupo Añaños. Navidad del “sí se puede, carajo”, mientras se levantan al país en costales de harina o de cocaína, que es lo mismo. Navidad de los weboncitos y weboncitas que te dirán “feliz Navidad, bróder”. Kiss my ass, brother. Navidad de los “Chicagos boys” con sus caras de vendepatrias, sus vidas absurdas y sus “hipótesis del mercado eficiente”. Navidad de los genocidas y demás asesinos que pondrán las llaves del BMW nuevo para el heredero en el árbol de pino. Navidad del Motorshow. Navidad de Larcomar, Jockey Plaza y Centro Comercial El Polo. Navidad de los engañados que jugarán al intercambio de regalos solo para cumplir con la trivia protoimperialista, la norma social y la feliz convivencia: “dame que te doy”, “toma que me das”. Navidad de los muertos de hambre que se comerán los huesos y devorarán las pasas y la frutilla de los que no comen grasas ni calorías, light, cero colesterol. Navidad del canillita que cobrará 50 céntimos por el diario chatarra y la noticia de siempre: niños con los rostros quemados, atropellados, acuchillados, desollados, baleados y demás muertos por indigestión, próstata, prolapso, males coronarios y diabéticos. Navidad de los empresauros cristianófilos que hablarán a moco tendido de “Jesús Redentor” y de esa maldición bíblica: “Comerás con el sudor de tu frente” con la que se justifica la antropofagia. Navidad Jerusalén del reverendoRodolfo González y su iglesia aprofujimontesinista Movimiento Misionero Mundial. Navidad Conga y su agua envenenada. Navidad VRAEM y los soldaditos de plomo burlados por la oficialidad. Navidad blanca de nuestra “gloriosa” Marina de Guerra del Perú. Navidad para los que duermen sobre cartones y se arropan asustados en la calle Guzmán Blanco, jirón Sandia, avenida 28 de Julio, avenida Bausate y Meza, jirón Huánuco, calle Lucanas, plaza Manco Cápac, Campo de Marte, etc., etc. Navidad para los artistas de plástico que expondrán sus miserias en una galería de la plutocracia y con curaduría de la ONU y el Ministerio de Cultura. Navidad para los filicidas, matricidas, uxoricidas y demás carniceros que destriparon a la abuelita para apurar la herencia familiar. Navidad para los reos contumaces y demás presos sepultados en vida a los que nunca les perdonarán haber develado el infierno. Navidad para los sufridos familiares de los 60 000 presos del Instituto Nacional Penitenciario. Navidad de los que viven el día a día. Navidad de los chicheros, punks, rockeros, cumbiamberos, hiphoperos, reggaetoneros; guaripoleras, bataclanas, prostivedettes; humoristas, ciclistas, guachimanes, comunicadores sociales; salchipaperos, taxicholeros, emolienteros, mazamorreros; fierreros, ferreteros, zapateros; vendedores de agujas, hilos, imperdibles y botones; vendedores de pasteles de choclo, papa rellena, hamburguesas de cartón y algodones de azúcar, chanfainita, caldo de gallina, chifa, siete colores, chilcano, menestrón, chunchulíes y cebiche de a sol. Navidad para los mangueros que suben y bajan de los micros con sus bolsas de caramelos. Navidad para los que todavía pueden decir “feliz Navidad” con la boca llena y un poco de cinismo. Navidad a la fuerza o en cucharadas para los judíos, mormones, khrishnas, mahometanos, budistas, sintoístas y la Iglesia del Nuevo Pacto del inmortal Ataucusi. Navidad para los ateos, agnósticos y seguidores de Antón LaVey. Navidad para los autopsiados en la Morgue Central de Lima y para los que esperan al juez instructor para el levantamiento del cadáver. Navidad para los muertos del cementerio El Ángel, Presbítero Maestro, La Planicie y el cementerio clandestino Manuel González Prada en el Callao. Navidad para los cadáveres insepultos de la guerra interna. Navidad para los jueces sin rostro y los jueces que cobran coimas en dólares o en especias. Navidad para la familia presidencial hasta su octava generación. Navidad para los congresistas comeoro, comecables, comepollos, lavapiés y demás líderes de barro, ajenos a todo esto y a toda razón, idea o concepto. Navidad, señores y señoras, ladies and gentlemen, llegó la Navidad en este país de cartón piedra, es hora de que empiece la función, la hora de los regalos o las regalías, el huevo de Pascua, el circo romano, la palmaditas de hombro y el beso de Judas; la hora del vive ahora y paga mañana, pasado mañana o “cuando puedas”, o muere ahora mismo, cierra los ojos, tápate los oídos, cierra la boca y no digas más. No digas más. No digas más.

También lo pueden leer aquí: http://letras.s5.com/ryb081212.html
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jueves, 6 de diciembre de 2012

PRESENTACIÓN DE LA NOUVELLE 'SECRETO DE ESTADO'', ESTE MIÉRCOLES 12/12/12


Nota de Prensa: 


El Gremio de Escritores del Perú y el grupo editorial Arteidea tienen el grato honor de presentar la nouvelle SECRETO DE ESTADO, de Rodolfo Ybarra, este miércoles 12 de de diciembre a las 7 pm., en la Asociación Guadalupana (av. Alfonso Ugarte 1398. Lima). En la mesa nos acompañarán el escritor Dante Castro y el académico Mathew Bernusconi, de la Universidad de Fritzburgo.

Como músico invitado estará César N.


"En la documental On the Bridge, de la guerra de Irak, un ex soldado de los Estados Unidos describe lo que sus superiores le pidieron para 'defender la democracia, el orden y el progreso'. Como un conductor de los convoys sus órdenes eran simples 'no parar' ni por los niños que habían en la carretera. Cuando el soldado preguntó a su superior cómo podría hacer eso, la repuesta era: 'fácil, piensa que solamente son baches'.
Raras veces leímos la historia contada por los vencidos, esa es la gran ventaja de ganar, poder escribir la historia. No hay que dar nombre a los baches ni mencionarlos, se justifica las acciones con una frase: 'todo se hizo por el bien de la patria. En Secreto de Estado (grupo editorial arteidea, 2012) nos encontramos con una entrevista grabada de un militar Peruano, quien con todo la seguridad del mundo que la entrevista no vería la luz, explica con honestidad brutal, los horrores que él y sus compañeros hicieron durante la guerra interna. Este es el contexto, que, con genial oficio literario, el autor Rodolfo Ybarra crea para dar voz a los vencidos. Un testimonio de la crueldad y matanzas de un gobierno. La historia que hasta hoy siguen intentando a sofocar." 



Zachary Payne 
Universidad de Hawai-USA


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sábado, 1 de diciembre de 2012

FALLECIÓ JULIO POLAR



Adiós, julio Polar, el dibujante, el poeta. Tus trazos, tu ejemplo insobornable se quedó para siempre con nosotros. Gracias por todo. Los artistas de acero siempre serán marginados por la plutocracia y por los enemigos naturales y predadores de la cultura (todavía recuerdo esa conversa). Quizás vuelvo a decir esto con rabia, pero tú sabes, amigo, que esa es la verdad. Que los ángeles (que salieron revoloteando de tus manos) te acompañen. Ahora leeré a JRR porque yo también "conocí a Julio Polar".

http://diario16.pe/noticia/20896-julito-polar-un-metro-y-medio-de-pura ternura#.ULpPqFKtIAs.facebook